Existe una hélice para cada usuario, o para cada forma de navegar
Probablemente la HÉLICE sea el componente más determinante de un barco, ya que de ella dependrá la velocidad alcanzada y eficacia en la navegación. Por lo tanto, no exageramos al afirmar, que la hélice precisa de una especial atención. En este sentido hay muchas teorías sobre el cálculo de hélices, si bien la experiencia en su estudio y el know-how en la fabricación son la base para un buen resultado en su aplicación.
La hélice debe calcularse partiendo de las características propias de cada embarcación: potencia efectiva del motor, relación de transmisión del inversor-reductor, tipo de barco, eslora de flotación, espacio de codaste, régimen de crucero al que se desee navegat, etc. para obtener el máximo rendimiento, en función de estas variables. En consecuencia, el estudio debe ser realizado por técnicos-especialistas, que lejos de una aplicación estandarizada estudien y fabriquen la HÉLICE PERSONALIZADA para cada caso.